eras
la cura perfecta,
la euforia
del amor de verano
que se derretía
en mis manos
y quemaba
mis huesos secos de infancia corta.
pero lo que me olvidé
fue que el verano se terminaba
en algún momento
y que después de la euforia
enfrentaba inmensos vacíos
donde te guardé
sólo para tener
la cura perfecta,
la euforia
del amor de verano
que se derretía
en mis manos
y quemaba
mis huesos secos de infancia corta.
pero lo que me olvidé
fue que el verano se terminaba
en algún momento
y que después de la euforia
enfrentaba inmensos vacíos
donde te guardé
sólo para tener
algo de ornamento
y alguien a quien mirar.
y alguien a quien mirar.
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